El elenco de Río de Janeiro derrotó 2 a 1 a Boca Juniors y se quedó con el trofeo del torneo más importante del continente, logrando realizar un récord que ostentaba el Cacique desde 1991.
La tarde de este sábado se conoció al nuevo campeón de la Copa Libertadores. Es un duelo que se adelantaba con fuerzas parejas Fluminense y Boca Juniors debían verse las caras en el Estadio Maracaná que, tal como se esperaba, se encontraba totalmente repleto y que mostró destacables muestras de apoyo por parte de las hinchadas.
Por lo mismo, el desarrollo del encuentro fue bastante reñido, algo que incidió en que se terminará por definir en el largue tras igualar 1-1 en los 90 minutos. Y es que Germán Cano (36′) fue el encargado de abrir el marcador para los brasileños, mientras que Luis Advíncula (72′) empató las cifras.
Tras ello hubo que esperar hasta los 99 para que se conociera al ganador, ya que John Kennedy convirtió el segundo tanto para el ‘Flu’, quedándose con la victoria por 2 a 1 y desatando la algarabía en el recinto deportivo de Río de Janeiro.
Si bien este resultado no afectaba en nada a Chile, sí tenía gran relación con Colo-Colo. Una de ellas tenía que ver con la presencia de un viejo anhelo que el club quiso incorporar en dos ocasiones, mientras que otra se remonta al año 1991, cuando el Popular conquistó aquel trofeo tan preciado.
Así lo dio a conocer el reconocido estadístico español Mister Chip, quien indicó que uno de los futbolistas del ‘Tricolor’ igualó una marca que ostentaba una leyenda alba desde aquella época. “Keno es el primer jugador con 2 asistencias en un partido final de Copa Libertadores desde que lo lograra el gran Marcelo Barticciotto con Colo-Colo, ante Olimpia, en el partido de vuelta de la final del año 1991″, comentó a través de su cuenta de X (ex Twitter).
Un triunfo que sigue siendo recordado
Cabe consignar que en aquel compromiso disputado un 5 de junio el Cacique derrotó inapelablemente por 3 a 0 a Olimpia de Paraguaya en el Estadio Monumental. Los goles en aquella fría noche fueron anotados por Luis Pérez en dos ocasiones y Leonel Herrera para entregarle la única Copa Libertadores a un equipo nacional.
