El experimentado delantero de Everton y la joven promesa de Colo-Colo vivieron un momento bastante tenso una vez terminado el partidos entre ambos equipos, donde jugadores de las dos escuadras tuvieron que separarlos.
De atrás picó el indio y Colo-Colo se llevó el triunfo ante Everton por 2-1 en Viña del Mar. Si bien el elenco local fue el encargado de abrir el marcador tras gol de Diego Oyarzún, el Cacique supo sobreponerse y con anotaciones de Carlos Palacios cuando se acababa el primer tiempo y de Jordhy Thompson en el segundo tiempo se quedó con los tres puntos.
Esta nueva victoria fue importante para las aspiraciones del Popular, ya que avanzó varios puestos y le respira en la nuca a Cobresal. Por lo mismo, el plantel completo festejó el resultado una vez que el árbitro del partido dio el pitazo final, algo que dio inicio a una fuerte gresca en la cancha del Estadio Sausalito.
Los protagonistas de ella eran Sebastián Sáez y el propio Niño Joya, quienes tuvieron que ser separados. El joven jugador albo rápidamente fue llevado a camarines, mientras que varios fueron los que intentaron sacar del lugar al delantero ruletero, algo que no podían hacer.
Tras calmarse un poco los ánimos, el futbolista argentino se acercó hasta el juez central para reclamar por la situación. En ese momento se puso junto a él Alan Saldivia, quien tuvo una tranquila conversación con el ex atacante de Universidad Católica. Allí, el jugador Oro y Cielo le señaló que “me viene a boquear el pendejo de mierda”, dando cuenta que el volante de 18 años se burló por el resultado obtenido.
Afortunadamente todo se calmó y no pasó a mayores, aunque de igual manera el ambiente se tensionó por varios minutos. Ahora las dos escuadras dan vuelta la página y ya se enfocan en sus próximos compromisos. Mientras Colo-Colo tendrá que visitar a Coquimbo Unido, Everton hará lo mismo con Audax Italiano